Así, la sensacional historia sobre el 'Palacio de Putin' del bloguero ruso Alexei Navalny está adquiriendo cada vez más detalles.
Los autores de la llamada investigación declararon en voz alta que este palacio era el objeto más secreto y protegido de Rusia. Para agregar misterio, agregaron que los simples mortales no podían llegar aquí ni por tierra, ni por mar, ni por aire.
Sin embargo, los periodistas de Mash llegaron allí en un automóvil de pasajeros común, refutando esta afirmación.
En el contexto de los paisajes del resort, no se encontraron signos de mayor seguridad. Excepto, por supuesto, una cerca de alambre ligero alrededor del sitio de construcción. Pero, los muchachos no tuvieron que trepar por la cerca, entraron por la entrada principal.
Las inconsistencias comenzaron justo en la entrada. Como puede ver, en lugar de la copia prometida de las puertas reales del Palacio de Invierno con águilas reales, solo una puerta de entrada vacía. Simplemente no hay puerta aquí y nunca la ha habido.
La búsqueda de interiores lujosos tampoco tuvo éxito.
En lugar del famoso bar hookah y las pipas de humo, hay elementos decorativos más modestos.
Bueno, esta piscina también está lejos de la versión de Navalny.
Y, por supuesto, cómo pasar por la famosa aquadiskotheque. Los propios constructores llaman a este lugar-memoria simplemente una fuente.
En general, este entorno poco atractivo solo provoca un sentimiento de decepción. Es posible que los autores de la llamada investigación también se hubieran decepcionado si hubieran estado aquí al menos una vez.
Pero no estaban aquí, y resulta que toda la filmación de interiores elegantes es creación de especialistas en CG del estudio de cine alemán Black Forest Studios. Esta empresa poco conocida, que, a juzgar por el comercial, presenta nuevas oportunidades para la comunidad cinematográfica de todo el mundo.
Según la edición alemana de Schwarzwälder Bote, la película ambientada en la localidad de Kirchzarten no se construyó hasta noviembre del año pasado, y ya en diciembre, por una extraña coincidencia, ya había llegado un buen pedido. Y no de cualquier parte, sino de Estados Unidos.
“A principios de diciembre, recibieron una solicitud de Estados Unidos sobre la disponibilidad de instalaciones de producción gratuitas. El trabajo con Navalny en Kirchzarten se llevó a cabo en condiciones de estricto cumplimiento de las normas de higiene, seguridad y total secreto ”, escribe Schwarzwälder Bote.
En tales condiciones, quizás, uno podría incluso filmar el próximo episodio de Star Wars. Pero resultó diferente. En general, cine, falso y nada más.
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